¿Qué hacer ante la caída de cabello?


 

La caída de cabello puede volverse un momento difícil a nivel emocional, tanto en hombres como en mujeres. Algunos pacientes relatan que les genera inseguridad e incluso baja autoestima. Por suerte, la ciencia avanza y ya disponemos de técnicas pioneras que producen resultados mejores cada vez.

Ya sea una pérdida de cabello estacional, fruto del envejecimiento o por alguna causa particular del paciente, cuanto antes se acuda a consulta, mejor será el resultado de cualquier tratamiento. Al igual que en otras patologías o problemas estéticos, la prevención juega un papel muy importante a la hora de conseguir resultados satisfactorios.

En cuanto a los tratamientos, tanto para frenar la caída como para mejorar el crecimiento, siempre se buscan protocolos cuyos resultados sean naturales y progresivos.

Hace años eran procedimientos mucho más demandados por las mujeres que por los hombres pero, de 5 años a esta parte, ha habido un aumento constante en la demanda masculina, sobre todo en jóvenes de mediana edad que quieren cuidarse y mantener un aspecto más joven durante más años.

 

CAUSAS DE LA PÉRDIDA DE CABELLO

Alopecia androgénica:  en los hombres, la causa más común de pérdida de cabello es la alopecia androgénica (pérdida de cabello de patrón masculino). Puedes consultar más sobre este tipo de alopecia aquí pero, a modo de resumen, se debe a una hipersensibilidad de los folículos capilares a una molécula derivada de la testosterona (la dihidrotestosterona). Además, la calvicie masculina suele ser hereditaria, sobre todo por parte de la familia materna.

Si estás notando una pérdida de cabello cuyo patrón comienza en las sienes, en la “coronilla” y además notas que tu cabello es cada vez más fino, es probable que pertenezcas a este grupo.

Las mujeres también pueden sufrir alopecia androgénica pero el patrón es distinto: el cabello se va afinando a lo largo de los años y, al contrario que el los hombres, no es mayor la caída sino la pérdida de densidad y la aparición de zonas más claras. Esto se da sobre todo en el la parte central de la cabeza, a lo largo de la “raya”. La consecuencia es que el cuero cabelludo es más visible. Suele darse después de la menopausia y se asocia a la presencia de testosterona, aunque un 15% de mujeres empiezan a experimentarla antes de los 40 años.

Alopecia areata: es un tipo de alopecia cuyos síntomas son la aparición de “calvas”, del tamaño aproximado de una moneda, en el cuero cabelludo.

Alopecia cicatricial: es aquella cuyas causas provienen de otras afecciones, por lo que el cabello no vuelve a crecer en esa zona.

Tricotilomanía: es un trastorno conductual dado que es el paciente el que tiende a arrancarse el pelo en determinadas zonas, de forma compulsiva.

Efluvio telógeno: es la caída del cabello en su fase de crecimiento sin un patrón consolidado. Las causas pueden ser diversas, siendo las más comunes una dieta desequilibrada, la ingesta de algunos medicamentos, alteraciones hormonales, etc. En este tipo de caída es donde se enmarca la “caída de cabello estacional”. Las causas no están muy claras. Algunas teorías apuntan que, debido a la elevada exposición solar durante el verano, se estimula la fase de crecimiento y es, al acabar el verano, cuando el cabello cambia de ciclo y comienza a caerse.

La parte positiva es que no suele desembocar en calvicie puesto que la caída es limitada en el tiempo, afectando de igual modo a hombres y mujeres.

 

TIPOS DE TRATAMIENTO PARA LA PÉRDIDA DE CABELLO

Medicación

Minoxidil

Habitualmente es el primer paso para tratar la pérdida de cabello debido a que su efectividad reside en detener y retrasar la pérdida. Por ello, es importante acudir cuanto antes a la clínica.

Hay 2 tratamientos aprobados por la FDA (Foods and drug administration) para pérdida de cabello:

  • Minoxidil: es un tratamiento domiciliario que se aplica directamente sobre el cuero cabelludo, realizando un ligero frotamiento, dos veces al día. Es apto tanto para hombres como para mujeres y el efecto suele ser perceptible de forma progresiva, siendo las 16 semanas el el “pico” del tratamiento. Dependiendo del paciente, el cabello ralentiza o detiene su caída, llegando incluso al crecimiento en algunos casos. La clave del buen resultado reside en la vasodilatación en el cuero cabelludo.
  • Finasterida: en este caso hablamos de un medicamento que se vende bajo prescripción médica y es únicamente para alopecia masculina. Los estudios demuestran que es exitoso en un 65% de casos y actúa bloqueando la transformación de testosterona en dihidrotestosterona. Es un tratamiento que debe seguir administrándose en el tiempo.

¡OJO AL MITO! Es muy popular relacionar la ingesta de Finasterida con la disfunción eréctil pero solo se aprecian efectos secundarios en un 3% de pacientes. Según el Dr. Martínez Escribano, “esto sucede en pacientes de edad avanzada que necesitan más dosis. Como cualquier medicamento puede tener efectos secundarios pero el riesgo es muy bajo, lo cual nos da seguridad a la hora de pautar el tratamiento”.

 

Mesoterapia

La mesoterapia para combatir la caída de cabello es uno de los tratamientos más aplicados en consulta, puesto que permite la infiltración de distintas sustancias en el cuero cabelludo. Lo habitual a la hora de realizar la mesoterapia para frenar la pérdida de cabello, es combinar distintos principios activos en los popularmente llamados “cócteles”. Utilizando microinyecciones con agujas muy finas, justo debajo del cuero cabelludo, se aplican uniformemente y se espacian de tal forma que toda la zona quede estimulada y nutrida.

Los productos más habituales son vitaminas, oligoelementos, medicamentos específicos y/o ácido hialurónico. El cabello absorbe estos elementos y el bulbo se refuerza y estimula.

En cuanto al diagnóstico, es efectiva en distintos tipos de alopecia, destacando en el efluvio telógeno, la pérdida de cabello androgenética, alopecia por estrés y alopecia areata. Por supuesto, en caída estacional también es un tratamiento recomendado.

mesoterapia capilar

PRP (Plasma rico en plaquetas)

Puede considerarse una mesoterapia pero en la que se aplica la sangre del propio paciente. A través de inyecciones en espacios de menos de 1cm, se infiltra el plasma con alta cantidad de plaquetas. El procedimiento consiste en extraer una pequeña muestra de sangre del paciente, se centrifuga y se separa el plasma que posteriormente se inyecta.

Numerosos estudios demuestran que es un procedimiento con resultados muy positivos y sin efectos secundarios destacables.

Otras técnicas

Actualmente existe la posibilidad de realizar un transplante de pelo, lo cual se cataloga ya como técnica quirúrgica. Se debe realizar por profesionales cualificados, en quirófano y con la técnica más adecuada para cada paciente.

Como alternativa a los procedimientos médicos destinados a frenar la caída del cabello o estimular su crecimiento, existen técnicas de simulación mediante la micopigmentación que imitan la apariencia de folículos o hebras de pelo real.

Si notas cualquier síntoma de los descritos y quieres tomar medidas eficaces, con expectativas reales, no dudes en pedir tu primera visita de diagnóstico.

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