El SOL, ¿amigo o enemigo?
En un artículo del periodista Víctor Rodríguez en La Verdad de Murcia, se explican los motivos por los que no debemos pasarnos tomando el sol, siguiendo también algunos consejos del Dr. Martínez Escribano.
Los niveles adecuados de vitamina D en sangre se asocian con mejor salud ósea y con menor incidencia de numerosas enfermedades crónicas e infecciones. Así se señala en un artículo del mes de junio de la revista médica J Paediatr Child Health., donde los autores concluyen que una dosis de exposición solar semanal, sobre todo en invierno, puede ser beneficiosa en niños pequeños para mantener unos niveles saludables de vitamina D en sangre, la cual ayuda a fijar el calcio en los huesos.
Sabemos que para que nuestro organismo sintetice vitamina D, se necesita la radiación ultravioleta. Por tanto, una dosis moderada de luz solar, tanto en adultos como en niños, ayuda a nuestra salud. Diez o quince minutos al día son suficientes para producir la vitamina D que necesitamos. La otra fuente de vitamina D es la dieta, sobre todo si se toman alimentos con suplementos de la misma.
La luz solar también nos levanta el ánimo y ayuda a prevenir o tratar la depresión. Por tanto, no podemos demonizar al sol y decir que hay que evitarlo a toda costa, pero sí que hay tener sentido común y prevenir los efectos indeseables que tiene la exposición solar aguda (quemaduras con o sin ampollas) y crónica (cáncer de piel, arrugas, flacidez, manchas…).
Sin embargo, en Medicina más vale prevenir que curar. La piel tiene memoria. El sol que se tome de más de joven, se puede pagar de mayor, a veces con un alto coste, como puede ser un cáncer de piel tipo melanoma.
Por ello, se aconseja usar protector solar tanto en invierno como en verano, siempre de factor 15 o superior, 50+ a ser posible. Se debe aplicar 20-30 minutos antes de la exposición solar y renovarlo cada 2 horas o antes si sudamos mucho o nos bañamos. El uso de fotoprotectores no exime de usar gorra o sombrero, gafas de sol y ropa adecuada a ser posible . Y por usar una crema solar no hay que aumentar nuestro tiempo de exposición solar.
